martes, 17 de febrero de 2009

EL ORGULLO DE UN PROFE

En muchas ocasiones me habéis escuchado decir lo orgulloso que estoy cada vez que me entero que alguno de mis antiguos alumnos me adelanta.

Insisto en que no me siento pequeño, al contrario, me hace grande porque siento cumplida mi labor de profesor que no debe ser otra que:
  1. Enseñar.

  2. Que los alumnos capten las ideas.

  3. Que las aplique para adelantar al "viejo" profesor.

Esto lo reitero porque hace unos días, Elsa de la Haza, no sólo fue finalista de los importantes premios CONCILIA, sino que fue galardonada con uno de los premios que se otorgaban.



Por todo esto os quiero agradecer a tantos y tantos lo que hacéis aunque es probable que todavía no lo podáis entender. Gracias por avanzar con vuestro esfuerzo y no medrando aquí y allá, gracias por no cejar en vuestro empeño, gracias por no perder el norte, gracias por no perder el contacto a pesar de nuestras discrepancias, gracias como tantas veces os he dicho por ser personas y no sólo profesionales. Gracias a todos y hoy en especial a Elsa. Gracias sobre todo por permitirme pensar que soy un granito de arena en vuestros logros.



2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es un gustazo que las ideas con las que enseñas den sus frutos. Entiendo que te sientas orgulloso. Te doy también a tí la enhorabuena.

pat dijo...

yo también me siento orgullosa de tí

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